viernes, 14 de junio de 2019

El segundo ataque a petroleros en un mes en el Golfo Pérsico enciende la alarma de un conflicto militar

Un mes después del sabotaje de cuatro barcos en las costas emiratíes, un suceso similar se ha producido este jueves, en plena escalada de la tensión entre Estados Unidos e Irán

El ataque a dos petroleros en el Golfo de Omán, huérfano aún de autoría, ha dejado hoy a uno de los barcos a la deriva,devorado por las llamas y con una densa columna de humo elevándose desde su malherido esqueleto. El sabotaje, el segundo acaecido en un mes en una zona clave para el transporte global de petróleo, ha disparado los precios del crudo y ha recrudecido el temor de un conflicto militar entre Estados Unidos, sus aliados en el Golfo Pérsico e Irán, tras semanas de tensión.
A última hora de este jueves, el secretario de Estado estadounidense Mike Pompeo ha responsabilizado a Irán del "flagrante asalto". "Esta conclusión se basa en la inteligencia, las armas empleadas, el nivel de experiencia necesario para ejecutar la operación, los recientes ataques iraníes contra otros barcos, y el hecho de que no exista ningún grupo 'proxy' operando en la zona que disponga de los recursos y la capacidad para actuar con semejante grado de sofisticación", ha señalado en rueda de prensa.
"Las fuerzas navales estadounidenses en la región recibieron dos llamadas de socorro a las 6.12 AM hora local y una segunda a las 7.00 AM", informaba Joshua Frey, portavoz de la Quinta Flota de la Armada estadounidense. Desde su base en Bahrein, el contingente vigila el estratégico estrecho de Ormuz, la vía por la que transita el 40% del total de petróleo transportado por mar en el planeta.
Las dos embarcaciones alcanzadas son el MT Front Altair,con bandera de las Islas Marshall y propiedad noruega, y el Kokuka Courageous, de Panamá y dueño japonés. A diferencia del sabotaje ocurrido el 12 de mayo, en el que los daños ocasionados en el armazón de los cuatro petroleros afectados por minas marinas fueron limitados, el parte en esta ocasión resultaba más serio.
Las imágenes difundidas por la televisión estatal iraní horas después de sufrir tres explosiones mostraban el fuego extendiéndose por la cubierta del Front Altair. Su tripulación -formada por 23 personas, entre ellas, 11 rusos, un georgiano y 11 filipinos- ha sido rescatada y llevada al puerto iraní de Jask. Su propietario, la empresa noruega Frontline, ha negado que el buque hubiese naufragado, descartando una información previa difundida por la agencia de noticias estatal iraní IRNA. El Front Altair transportaba 75.000 toneladas de nafta, un compuesto líquido de hidrocarburos derivados de la refinación del petróleo, que habían sido cargados en el puerto emiratí de Ruwais y se dirigían a Taiwán.
La segunda víctima de la arremetida, el Kokuka Courageous, había partido del puerto saudí de Al Jubail en dirección a Singapur con 27.000 toneladas de metanol. Su tripulación, compuesta por 21 empleados de nacionalidad filipina, ha abandonado el buque después de sufrir un segundo ataque tres horas después de la primera explosión. Ha sido rescatada por un navío cercano. "La carga de metanol está intacta", ha asegurado el dueño del petrolero, Bernhard Shulte.
La embarcación ha sufrido desperfectos en el costado de estribor y uno de los trabajadores a bordo ha sido atendido por heridas leves. Según Teherán, ambas tripulaciones han sido rescatadas por la Marina iraní, una información tildada de "falsa" por Washington, que asegura haber rescatado a 21 marineros de una de las dos embarcaciones, que Irán aseguró anteriormente que había salvado. EEUU ha desplazado hasta la zona el USS Bainbridge, un destructor con misiles guiados, para auxiliar a las dos embarcaciones.
Por el momento nadie ha reivindicado la responsabilidad sobre unos ataques que, ocurridos a las puertas del estrecho de Ormuz, parecían seguir el patrón del sabotaje de cuatro petroleros registrado el mes pasado frente a las costas del emirato de Fujairah. Un ataque previo que aún proyecta interrogantes, entre ellos su autoría.

No hay comentarios :

Publicar un comentario